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martes, 7 de abril de 2015

BUENO Y MALO por Eckhart Tolle

BUENO Y MALO
por Eckhart Tolle

En algún punto en sus vidas, la mayoría de las personas perciben que no hay solamente nacimiento, crecimiento, éxito, buena salud, placer y ganar, sino también pérdida, fracaso, enfermedad, envejecimiento, decaimiento, dolor y muerte. Convencionalmente esto se etiqueta como ‘bueno’ y ‘malo’, orden y desorden. 

El ‘significado’ de la vida de la gente se asocia usualmente con lo que denominan lo ‘bueno’ pero lo bueno está continuamente amenazado por el colapso, el rompimiento, el desorden; amenazado por el sin sentido y lo ‘malo’ cuando las explicaciones fallan y la vida deja de tener sentido.  

Tarde o temprano, el desorden irrumpirá en la vida de todos independientemente de cuántas pólizas de seguros ellos tengan. 

Puede venir en forma de pérdida o accidente, enfermedad, discapacidad, vejez, muerte. Sin embargo, la irrupción del desorden en  la vida de una persona, y el colapso resultante de un significado mentalmente definido, puede convertirse en la apertura a un orden superior.   

 ‘La sabiduría de este mundo es una falsedad con Dios’ dice la Biblia. ¿Cuál es la sabiduría de este mundo? El movimiento del pensamiento, y el significado que se define exclusivamente mediante el pensamiento. 

El pensamiento aísla una situación o evento y lo denomina bueno o malo, como si este tuviese una existencia separada. A través de la dependencia excesiva en el pensamiento, la realidad se fragmenta. 

Esta fragmentación es una ilusión, pero parece muy real mientras están atrapados en ella. Y sin embargo el universo es un todo indivisible en el cual todas las cosas están interconectadas, en el cual nada existe en aislamiento. 

La más profunda interconexión de todas las cosas y eventos implica que las etiquetas mentales de ‘bueno’ y ‘malo’ son al final,  ilusorias. Siempre implican una perspectiva limitada y por tanto son verdaderas solamente de manera relativa y temporal. 

Esto lo ilustra la historia del sabio que ganó un automóvil de lujo en una lotería. Su familia y amigos estaban muy felices y vinieron a celebrar. ‘No es grandioso’ decían, ‘tienes tanta suerte’. 

El hombre sonrió y dijo: ‘quizás’. Durante unas semanas disfrutó conduciendo el automóvil. Entonces un día un chofer borracho chocó contra su automóvil nuevo en una intersección y él terminó en el hospital, con múltiples heridas.  Sus familiares y amigos vinieron a verlo y dijeron, ‘esto fue realmente desafortunado’. 

De nuevo el hombre sonrió y dijo: ‘quizás’. Mientras estaba en el hospital, una noche ocurrió un temblor de tierra y su casa cayó al mar. De nuevo sus amigos vinieron al próximo día y dijeron, ‘que suerte tuviste por haber estado en el hospital’. De nuevo el dijo: ‘quizás’.     

Los ‘quizás’ del hombre sabio significan una negación a juzgar cualquier cosa que ocurra. En lugar de juzgar lo que es, el lo acepta y así entra en alineación consciente con el orden superior. 

El sabe que a menudo es imposible que la mente entienda qué lugar o propósito ocupa un evento aparentemente al azar en el tejido de la totalidad. Pero no hay eventos al azar, ni hay eventos o cosas que existan por y para sí mismos, en aislamiento. 

Los átomos que componen su cuerpo fueron forjados una vez dentro de las estrellas, y las causas de aún el evento más minúsculo son virtualmente infinitas y están conectadas con el todo en formas incomprensibles. Si quisiesen retrotraerse a la causa de cualquier evento, tendrían que ir hasta el comienzo de la creación. El cosmos no es caótico.

La propia palabra cosmos significa orden. Pero este no es un orden que la mente humana pueda comprender, aunque a veces pueda atisbarlo.

Extraído de Eckhart Tolle’s A New Earth, páginas 195-197
© Derechos de autor 2008-2015. Eckhart Tolle . Todos los derechos reservados. http://www.eckharttolle.com/
Traducción: Fara González
Difusión: El Manantial del Caduceo

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